Cada 8 de junio celebramos el Día Mundial de los Océanos. Es una ocasión para reflexionar sobre la importancia de estos vastos cuerpos de agua para nuestro planeta y tomar medidas para su conservación. Desde su creación en 1992 por la ONU, este día ha servido como un recordatorio crucial de la necesidad de proteger nuestros océanos, que cubren más del 70% de la superficie de la Tierra y son fundamentales para la vida en el planeta.
Los océanos desempeñan un papel vital en la regulación del clima global: proporcionan oxígeno, alimentos y recursos naturales a millones de personas en todo el mundo. Sin embargo, enfrentan una serie de amenazas, incluida la contaminación plástica, la acidificación causada por el aumento de dióxido de carbono en la atmósfera y la sobreexplotación de recursos marinos.
Cada año, millones de toneladas de plástico terminan en los océanos, contaminan los ecosistemas acuáticos y amenazan la vida marina. Para abordar este problema, se necesitan acciones a nivel global, desde la reducción del uso de plásticos de un solo uso hasta la implementación de políticas de gestión de residuos más efectivas.
La acidificación oceánica, causada por la absorción de dióxido de carbono atmosférico, amenaza a los organismos marinos que dependen de estructuras de carbonato de calcio, como los corales y los moluscos, poniendo en peligro los ecosistemas marinos enteros.
La sobreexplotación de recursos marinos, como la pesca excesiva, también plantea desafíos significativos para la salud de los océanos. La pesca insostenible puede llevar a la disminución de poblaciones de peces, desequilibrar los ecosistemas marinos y afectar negativamente a las comunidades que dependen de la pesca para su subsistencia.
Sin embargo, aún hay esperanza para nuestros océanos. La creación de áreas marinas protegidas, la adopción de prácticas pesqueras sostenibles y la promoción de la educación ambiental son solo algunas de las medidas que pueden ayudar a proteger y restaurar la salud de nuestros océanos.
¿Quieres ayudar al océano? Estas son algunas formas
1.- Reduce el consumo de plástico
Puedes optar por productos reutilizables en lugar de desechables. Cuando vayas de compras, lleva tu propia bolsa de tela o totebag, utiliza botellas de agua reutilizables y evita los utensilios de plástico de un solo uso.