La Semana Mundial del Agua 2024, que este año se celebrará en Estocolmo, Suecia, del 25 al 29 de agosto, se centrará en un tema de crucial importancia: la cooperación hídrica. Bajo el lema "Uniendo fronteras: agua para un futuro pacífico y sostenible", este evento global destaca la necesidad de colaboración entre comunidades y naciones para garantizar un acceso equitativo y seguro al agua, un recurso vital para la paz y el desarrollo sostenible.
El agua, un derecho humano fundamental, sigue siendo inaccesible para millones de personas en todo el mundo. Según el Banco Mundial, aproximadamente 2000 millones de personas carecen de acceso a servicios de agua potable gestionados de manera segura. Además, las brechas en el saneamiento, el crecimiento demográfico y el cambio climático han profundizado la crisis hídrica, transformando al agua en uno de los mayores riesgos para el progreso económico y social.
En México, la situación es igualmente alarmante. De acuerdo con el reporte “Perspectivas de Agua en México, propuestas hacia la seguridad hídrica”, elaborado por Red de Agua de la UNAM, CERSHI, UNESCO y Agua Capital, 6 millones de personas en el país no tienen acceso a agua potable, aunado a que las sequías y la sobreexplotación de acuíferos se han intensificado en los últimos años. Sólo el 58% de la población cuenta con agua diariamente en su domicilio y saneamiento básico mejorado, mientras que millones de personas continúan sin acceso a estos servicios esenciales.